Muchos padres se sienten desorientados a la hora de incorporar los alimentos en la nueva dieta de su bebé. Supone un momento de cambio, donde una vez más encontramos muchas opiniones, teorías y tendencias.
Personalmente me gusta mucho el concepto de Baby Led Weaning (BLW), por muchos motivos: la lactancia sigue siendo fundamental, se fomenta la psicomotricidad fina, coordinación mano-ojo- boca, la comida se convierte en un área más de exploración y descubrimiento (diferentes texturas, sabores, colores y formas) y a nivel psicológico potencia que el niño este en contacto desde el principio con sus necesidades y apetencias, dándole poder de decisión. Es importante aclarar que es muy bueno dejar que elijan pero no siempre se puede tener lo que se quiere y este es un aprendizaje también muy importante.
Aunque de manera abierta y general sea partidaria de la incorporación de los sólidos a demanda desde el primer momento, es recomendable que se realice una valoración individual. No todas las familias son iguales y cada bebé es único con sus diferentes necesidades, ritmos, capacidades metabólicas, etc. Por ello, cuando las familias me consultan de forma particular siempre tengo en cuenta: principalmente, la constitución del bebé (qué alimentos le pueden ir mejor y en qué orden), las preferencias de los padres (no todas las familias pueden o aceptan llevar a cabo BLW), cuando se incorporan al trabajo, quién está al cuidado de su hijo, cuál es la alimentación que ellos siguen, en que época del año estamos….Y en conjunto vamos elaborando poco a poco un calendario de incorporación y una recomendación de alimentos que varía más o menos según el bebé y su familia.
Marta Reyes
Naturópata
muy bueno